sábado, 8 de enero de 2011

The fábula.


Todavía confío en el cielo.
Todavía lo miro y le creo.

Y él, me ha contado que existe,
en la tierra, otro paralelo.
Es el cielo de tus ojos.
Portador de infinitos colores.
Ha sabido regalarme soles
Y sacarme de esta tormenta gris.
Mi ansiada alegría se ha convertido en hecho.
No tiene límites este amor: esta locura no tiene techo.
Todavía me fio del agua.
Precisa, no se equivoca en nada.
Y me dice que existe pureza
Similar a la de su esencia.
Que la busque, está en tu alma.
Es entonces que rompo esta coraza
y dispuesto a jugarme el pellejo
Dejo que me lleve tu viento.
Has hecho de esa roca de nuevo un corazón.
Voy perdiéndome en tu boca. Es así: Soy feliz en tu estación.

No existen más que momentos.
Están los malos, y están los buenos.